Conexiones Inconexas en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires
Conexiones Inconexas es el guion curatorial de la exposición del artista Sebastian Puentes Rivero en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires
12/7/20243 min read
Es un momento de la humanidad donde la globalización impera, pero ya no como sueño utópico sino con sus perjuicios y deterioros a la vista.
Enriquece pensar esta Era, citando a Néstor García Canclini, como una sociedad mundial, de sujetos Diferentes, Desiguales y Desconectados.
Esta “madeja de comunicaciones distantes e incertidumbres cotidianas, atracciones y desarraigos, que se nombra como Globalización” ha generado una multiplicidad de nuevas diversidades y realidades a las que muchas veces les cuesta encontrar su lugar.
Siempre se ha considerado que poseer cultura es sinónimo de estar conectado. Sin embargo, en un mundo donde los cambios tecnológicos en torno a lo comunicacional han precipitado numerosas transformaciones, debemos “reconocer las diferencias, corregir las desigualdades […] y conectar a las mayorías a las redes globalizadas”, de lo contrario y como ha venido ocurriendo se crean nuevas diferencias y desigualdades.
Resulta paradójico que en tiempos de hiperconectividad, donde las relaciones sociales fluyen a raudales, la conexión entre las personas, profunda y bien entendida, resulte un bien escaso. Sin mencionar la complejidad del vínculo entre éstas y el entorno natural donde se desarrollan, y el respeto o no a ese hábitat.
Sebastián Puentes Rivero es un talentoso artista emergente, aunque de perfil un tanto reservado. Gran parte de su producción artística consta de imágenes más bien idílicas, que exploran los pequeños, íntimos y bellos momentos de la vida. Sin embargo, en los últimos años ha venido desarrollando obras de arte que, pese a mantener su particular lenguaje, simple pero por demás atractivo, se interrogan por ciertas problemáticas contemporáneas de la existencia humana. De forma sutil aborda la cuestión de la vida en las grandes urbes, la migración, la identidad, las raíces, la velocidad de la vida, y más profundamente, la interacción entre las personas: Se interesó por sus diferencias y la forma de aproximarlas.
La reflexión en torno a las prácticas de comunicación y a los modos actuales de relacionarse con el entorno, con los Otros y con sí mimos se volvió protagonista: El modo en que habitamos y en que nos habitan.
Pese a nuevas tendencias que buscan soluciones superficiales, la cuestión está lejos de ser resuelta. No se trata simplemente de un tránsito a lo que se denomina JOMO (Joy Of Missing Out), la Alegría de estar desconectado no parece ser una solución efectiva al FOMO (Fear Of Missing Out), ese Miedo a perderse algo en un universo digital que de todas maneras resulta inabarcable. La Alegría de estar desconectado parece esconder que es inherente al ser humano la conexión con los Otros y con su entorno natural.
Los cambios necesariamente deben ser más profundos, conexiones de calidad que no acaben inconexas puede quizás ser el camino.
Adoptar una valoración de la Diferencia, no a modo de tolerancia, sino muy por el contrario, construir interconexiones con los cercanos y los distantes. Abrazar nuestras Diferencias.
Indagar acerca de la relación entre las personas, y entre ellas con su entorno, no es para nada novedoso en el arte. Continuamente los artistas, preocupados por las problemáticas de su tiempo y de las que están por venir, abordaron temáticas semejantes. El arte en particular, y la cultura en general, se constituyen como el espacio donde nos encontramos y nos reconocemos.
Conexiones Inconexas invita a una reflexión profunda, intima, indagar al interior del propio ser. Los modos vertiginosos de la vida contemporánea, la forma de relacionarnos, que parece tender más a alejarnos que a aproximarnos
Conexiones Inconexas propone simplemente comenzar a observar con detenimiento. Respetar lo que nos rodea. Despertar la sensibilidad, cultivar el respeto y Abrazar Nuestras Diferencias.